Habla Dierk Hierschel, del sindicato alemán Verdi:
‘El comportamiento de Merkel es ‘muy contradictorio’.
‘Desde que estalló la crisis el BCE permite que Deutsche Bank, el Commerzbank y otros, les den sus papeles-basura como garantías y reciban por ello créditos frescos al tipo de interés básico. Donde el volumen actual de activos tóxicos privados en depósito del BCE es cuatro veces mayor que el volumen de los bonos de Estado comprados por el banco. Ni Merkel ni el Bundesbank han criticado nunca esta creación privada de dinero, pero cuando los estados quieren tener el mismo derecho mediante los eurobonos, los critican como si fuera algo endemoniado’.
Efectivamente. Como ya comenté en mis artículos La vergüenza de ser europeo y ¿Qué quiere salvar Europa? el único interés de Alemania y Francia es dominar Europa mediante el poder absoluto. La UE no es una “unión”, es una conquista que en lugar de hacerse por las armas, ha sido realizada mediante el fraude, el engaño, el robo, una burocracia absorbente, regalos y préstamos usados como caballos de Troya (fondos de cohesión) y leyes partidistas que benefician a los países y empresas grandes para dominar a los pequeños. Todo bajo el marco de la ley. Los criminales están dictando las leyes para protegerse de sus víctimas. Merkel ya nos tiene habituados a su doble discurso de en mi casa hago esto, y fuera lo contrario:
“¿Tienen algún interés Sarkozy, Merkel, Barroso y todos los eurócratas en hacer un mercado europeo sano y próspero? Ninguno. Merkel siempre fue contraria a las quitas bancarias de Grecia hasta que un día se presentó como su mayor defensora. A la semana descubrimos que la banca alemana había reducido la exposición a la deuda periférica (España, Italia, Grecia, Portugal e Irlanda) en un 50%. Concretamente, Deutsche Bank, desde diciembre de 2010 hasta hoy, ha reducido su exposición a los periféricos en más de un 60%. Merkel ha ganado tiempo para que el impacto de la quita griega, y las que puedan venir como la de Italia y España, dañen lo menos posible a sus bancos”.
El experimento, por eso no sale bien. A este paso Alemania va a gobernar ruinas. La curva de tipos italiana ya está invertida, y la de España está a un paso de hacerlo. Ambos países son técnicamente insalvables. No serán los eurócratas los que sufran las consecuencias de su fallido experimento, sino nosotros.
