Las bases de Mises

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El Instituto Mises es el nexo de la escuela austriaca. Hace años, pocos podrían haber imaginado tanta riqueza de información archivada en un solo sitio web. Cientos de libros y artículos académicos, miles de artículos no académicos y multitud de videos y audios almacenados en línea… todo gratis.

Mientras que hace sólo un año los estudiantes de economía tenían que viajar para estudiar con sus economistas favoritos, hoy el Instituto Mises acaba con la distancia mediante el uso de un aula interactiva en línea. En buena medida, el Instituto Mises (a través de Internet) ha roto el monopolio público de la educación, permitiendo a estudiantes de todo el mundo ver la sociedad global a través de un cristal diferente.

Por muy bueno que sea el Instituto Mises, sólo es tan eficaz y fuerte como el número de personas que conozcan su existencia. Así, el Instituto ha dado grandes pasos para hacer que sus contenidos multimedia estén disponibles a través de las herramientas de búsqueda más comunes y la proliferación de blogs ha ampliado el alcance de la escuela misesiana. También ha mejorado su conocimiento gracias al éxito de una serie de libros austriacos con éxito de ventas, incluyendo Meltdown, de Tom Wood y End the Fed, de Ron Paul, éxitos debidos en parte a su difusión oral a través de Internet y la suerte de recibir críticas positivas.

Hay un método fuera de Internet e independiente de la publicación por el que pude difundirse aún más el mensaje misesiano. No es otro que volver al anticuado grupo de lectura o “tertulia”. Aunque pueda parecer aburrido e ineficaz a algunos, con trabajo duro, dedicación y creatividad, un grupo de lectura en una buena manera de alcanzar a miles de personas en la localidad en que se realizan estas reuniones.

Una organización así es la tertulia Lunes de Mises, una reunión semanal en un café local de San Diego, California. Creada y desarrollada por los propietarios del Café Libertalia (Jesse Thomas y Donna Orlando), Lunes de Mises se ha convertido en el oasis misesiano del Condado de San Diego. Gracias a los esfuerzos de estos dos propietarios, Lunes de Mises ofrece un excelente ejemplo de lo que pueden lograr los individuos actuando fuera de la presencia directa en línea del Instituto Mises.

El fin principal de la tertulia semanal es discutir un número concreto de capítulos del libro que el grupo haya decidido leer. Por ejemplo, una parte importante de 2009 se empleó en leer y discutir La acción humana, de Ludwig von Mises. Después de acabar La acción humana, el grupo empezó con Man, Economy, and State, de Murray Rothbard. Esto no sólo ofrece un incentivo a un buen grupo de gente de conocer esta obra magna, sino que también permite a los lectores discutir los detalles de cada capítulo. La consecuencia es una compresión mucho mejor del material leído.

La tertulia no sólo se dirige a estudiantes y profesores universitarios. Lunes de Mises también a proyectado partes de “Economía para estudiantes de secundaria”, tratando de ofrecer una perspectiva austriaca a la generación más joven, aunque sólo sea para equilibrar la teoría económica enseñada en la escuela. Quienes tienen interés suficiente en el material continúan discutiendo sobre economía austriaca con sus iguales y compañeros de aula.

A través de los medios sociales en línea e incluso el anticuado boca a boca, la masa de participantes activos en los Lunes de Mises ha crecido lentamente. Pero contar simplemente los miembros no incluye los cientos que se ven influenciados cuando se acercan a los miembros activos, ya sea en el café, en clase o en cualquier otro evento social.

El cofundador Jesse actúa en la política municipal, participando en reuniones del municipio y foros políticos. Aunque no pretenda necesariamente cambiar la sociedad mediante la política (lo que se suele conocer como coacción), Jesse divulga con éxito el mensaje libertario a quienes tal vez nunca hayan oído hablar de él. Aunque esto probablemente tenga pocos efectos positivos a corto plazo, la influencia a largo que podría tener este tipo de activismo es incalculable.

Otros miembros del grupo, gracias a sus lecturas de economía austriaca y filosofía política libertaria, tienen ahora mucha información a divulgar escribiendo cartas a los directores de publicaciones locales, e incluso nacionales. Muchos de los miembros son jóvenes estudiantes universitarios que también participan en clubes libertarios en diferentes campus de San Diego, incluyendo la Universidad de California en San Diego, la Universidad Estatal de San Diego y la Universidad de San Diego (que acogió a Tom Woods, gracias a los esfuerzos de la organización libertaria de estudiantes del campus). Esta coordinación de esfuerzos de Lunes de Mises y los clubes libertarios de los campus posibilita que el pensamiento austriaco se extienda a la próxima generación de estadounidenses.

Pero leer no es la única actividad que se realiza en Lunes de Mises. La gente también ve vídeos y conferencias, ofrecidas en su mayor parte por el Instituto Mises. Los asistentes también tienen la oportunidad de discutir sobre libertarismo con gente con ideas similares, lo que ayuda a compartir y fortalecer ideas.

No todos los libertarios son iguales. El grupo disfruta de una mezcla ecléctica de anarquistas y minarquistas, provocando debates sobre los límites y la extensión del estado dentro del pensamiento libertario. Lunes de Mises también ha atraído a otros asistentes no libertarios, incluyendo conservadores y “liberales de izquierda” (una calificación que incluye a socialistas, socialdemócratas y progresistas). Lejos de ser una carga, este amplio espectro ideológico produce un sano debate y demuestra que estos grupos de tertulia libertaria pueden alcanzar eficazmente a quienes no necesariamente estén de acuerdo con el mensaje. La clave es influenciar a otros y en este aspecto Lunes de Mises ha hecho un trabajo extraordinario.

La interacción del grupo de lectura con no libertarios va más allá de las discusiones a nivel individual. Los dos cofundadores utilizan el grupo de lectura como trampolín para el más ambicioso proyecto de acoger debates en el Café Libertalia. El primer debate fue “Voluntaristas contra Socialistas”, realizado entre conocidos anarquistas de mercado locales (incluyendo a Joey Hill, un antiguo alumno del Instituto Mises) y un equipo de profesores socialdemócratas. Con una asistencia de al menos sesenta personas y visto por cientos en la web, el debate fue un método excelente con el que probar la solidez de la teoría libertaria frente a puntos de vista opuestos. También presentó la teoría libertaria a quienes asistieron sólo para ver a la parte contraria.

El éxito de Lunes de Mises depende del Instituto Mises. Las relaciones entre las tertulias de las bases locales y el Instituto Mises son mutuamente beneficiosas. Lunes de Mises puede tener gente en las lecturas semanales principalmente porque éstas las ofrece gratis el Instituto Mises. No hay mayor archivo organizado de pensamiento austriaco y, como tal, Mises.org ofrece todo el material para cualquier tópico del que el grupo quiera ocuparse.

A cambio, aunque por supuesto en su propio beneficio (¡después de todo, justificamos la sociedad capitalista!), Lunes de Mises coordina la presencia de los naturales de San Diego en los eventos del Instituto Mises. Uno de esos eventos fue “Economic Downturns”, realizado en Newport Beach. Otro evento al que los miembros de Lunes de Mises piensan acudir es la “Freedom Fest”, en Las Vegas, en la que participará el Instituto Mises.

Muchos asistentes a la conferencia de Tom Wood en la Universidad de San Diego indicada antes estuvieron allí gracias al trabajo de Lunes de Mises. Aunque sólo sea un pequeño pico del tráfico total de Mises.org, también merece la pena mencionar que miles de visitantes únicos han llegado a los sitios web del instituto gracias a los extraordinarios esfuerzos de Lunes de Mises.

El hecho de que los cofundadores del grupo fueran asimismo propietarios del café que acoge la tertulia semanal significa que pueden divulgar fácilmente las distintas publicaciones entre los clientes. Así, cada cliente que toma un café tiene a su alcance lo escrito en Free Market, Mises Daily y otros escritos descargados de los archivos de Mises.org. Los miembros del grupo, incluido el cofundador Jesse, divulgan animosamente estas publicaciones en eventos públicos, influenciando a gente fuera de la tertulia.

Tratando de llevar al movimiento de la libertad al hacer al Café Libertalia un refugio local para los libertarios, Jesse y Donna han empezado a planificar su proyecto más ambicioso hasta ahora. Es nada menos que una biblioteca libertaria privada, organizada en las paredes del café. Los estudiantes locales de la teoría austriaca y libertaria tienen actualmente acceso a los ficheros digitales mediante el sitio web o pueden comprar directamente los libros. El plan de Jesse y Donna de tener una biblioteca misesiana significaría que los interesados tendrían libros físicos a su disposición para leerlos en el café (o comprarlos a un precio razonable). A largo plazo, la biblioteca tendría libros sobre diversas materias, de la economía a la filosofía.

Pero una “biblioteca de la libertad” local no es más que un grano en la visión de Jesse y Donna. Utilizando estos libros y el enorme número de recursos disponibles en línea, Café Libertalia se convertiría en un centro de aprendizaje por sí mismo. Estudiantes de distintas edades podría acudir a conferencias sobre economía austriaca y teoría política libertaria, ofreciéndoles un currículum de otra forma imposible de obtener.

Un programa activo como éste también llevaría a acrecentar el interés por métodos similares de enseñar libertarismo en escuelas secundarias y universidades locales. De hecho, no sería inconcebible encontrar alguna forma de coordinar a los estudiantes locales con la academia en línea del Instituto Mises. Es la belleza del emprendimiento, en la que las posibilidades sólo se ven limitadas por la creatividad humana.

La llegada de Internet, con el desarrollo de sitios web fácilmente accesibles o foros en línea, parecía haber hecho obsoletas las antiguas tertulias. La verdad es que esas tertulias, igual que los grupos de lectura, siguen siendo muy relevantes, especialmente si aprovechan los sitios web como Mises.org para conseguir gratis (o con un coste relativamente bajo) la mayoría de los recursos necesarios mientras divulgan el libertarismo entre gente que de otra forma no los hubieran encontrado navegando por Internet.

Lunes de Mises es sólo un ejemplo. San Diego disfruta de unas pocas de estas tertulias: tanto la Universidad de California en San Diego como la Universidad de San Diego tienen clubes libertarios “Young Americans for Liberty”, por ejemplo. Lo grande es que estos grupos pueden interactuar y cooperar y el resultado es alcanzar todo el territorio nacional.

Por supuesto, hay una serie de beneficios personales de los que puede disfrutar una persona creando un grupo así o formando parte de una organización ya existente. No sólo se encuentran personas que piensan de forma similar, sino que nos beneficiamos de conversaciones intelectualmente interesantes. Así, al tiempo que el anticuado grupo de lectura resulta ser un método eficaz para difundir la libertad, también resulta ser muy entretenido.

Traducido del inglés por Mariano Bas Uribe. El artículo original se encuentra aquí.