“Esencialmente, el análisis económico consiste en: (1) un entendimiento de las categorías de la acción y en un entendimiento del significado de un cambio en los valores, los costos, el conocimiento tecnológico, etc.; (2) una descripción de una situación en la cual las categorías asuman un significado concreto, donde personas determinadas sean identificadas como actores con objetos específicos como medios de acción, con objetivos determinados identificados como valores y cosas determinadas especificadas como costos; y (3) una deducción de las consecuencias que resulten del desempeño de alguna acción especificada en esta situación, o de las consecuencias que resultan para el actor si esta situación es cambiada de una forma específica. Y esta deducción tiene que producir conclusiones válidas a priori, siempre y cuando no haya un fallo en el mero proceso de deducción,(…) porque entonces su validez retornaría a la validez indisputable de las categorías de la acción”.