La teoría austriaca de la utilidad y el bienestar observa que todas las transacciones en una economía de libre mercado tienen lugar solo cuando amabas partes creen que estarán más satisfechos como resultado de un intercambio. La gente actúa de formas que maximizan su bienestar personal, entendido subjetivamente. Por el contrario, en economías centralizadas, la única forma en que el estado puede aplicar sus decisiones económicas es a través de la amenaza de fuerza ante el incumplimiento o del miedo.
Podríamos decir que el capitalismo es un sistema basado en la felicidad, mientras que el comunismo (y todas las formas de intervencionismo) son sistemas basados en el miedo.
Es una gran idea en teoría, pero ¿hay alguna forma de validar su verdad en la práctica?
Si la tesis es correcta, debería esperarse ver constantemente a gente deseosa de mudarse de las economías basadas en el miedo a las economías basadas en la felicidad.
Según en Índice de Libertad Económica,[1] éstos son los 20 apíses con menos libertad económica:
- República del Congo
- Vietnam
- Guinea-Bissau
- Siria
- Surinam
- Bangladesh
- Nigeria
- Bielorrusia
- Tayikistán
- Haití
- Venezuela
- Uzbekistán
- Irán
- Cuba
- Laos
- Turkmenistán
- Zimbabwe
- Libia
- Birmania
- Corea del Norte
No son países a los que la gente quiera mudarse habitualmente. De hecho, en varios de ellos es ilegal abandonar el país.
Las estadísticas de emigración neta confirman que estos países tienen un flujo migratorio de salida de -1,12‰.[2] En otras palabras, todos los años estos países ven 1,2 personas mas trasladándose a otro país por cada 1.000 habitantes que personas de otro país entrando en ellos. Está claro que esta representa una insatisfacción general con la vida en ese país (especialmente dado que estas cifras serían mayores si no fuera ilegal abandonarlos).
En el lado opuesto del espectro, los 20 países más libres económicamente en el mundo son:
- Hong Kong
- Singapur
- Luxemburgo
- Estonia
- Irlanda
- Nueva Zelanda
- Reino Unido
- Dinamarca
- Islandia
- Australia
- Chile
- Suiza
- Estados Unidos
- Suecia
- Finlandia
- Canadá
- Países Bajos
- Alemania
- Austria
- Bahréin
Basándonos en nuestra tesis, no sorprende que estos países sean mucho más deseables para vivir y tengan un flujo migratorio neto positivo de 3,31‰. Y al contrario que aquellos países con economías extremadamente centralizadas en los que era ilegal abandonarlos, en la mayoría de los países económicamente libres hay límites a los inmigrantes autorizados a trasladarse a ellos debido a la enorme demanda. Si no estuvieran las restricciones en ambos lados, veríamos una diferencia aún mayor en la emigración neta.
Así que nuestra teoría se sostiene: las economías dirigidas centralizadamente más extremas, o bien ven un flujo neto de salida de su población o está prohibido legalmente abandonarlas, mientras que los países más libres económicamente ven un fuerte flujo neto de entrada de gente de otros países.
El principio sigue siendo cierto no solo para los extremos. De los 154 países que están listados en el Índice de Libertad Económica, comparando lo 77 superiores con los 77 inferiores también vemos que la mitad superior (más libre económicamente) tiene un flujo migratorio neto positivo medio de 0,83‰, mientras que la mitad inferior (menos libre económicamente) tiene un flujo migratorio neto negativo medio de -0,57‰.
Los patrones migratorios de la gente alrededor del mundo muestran claramente que la gente se mueve constantemente de economías dirigidas centralizadamente a economías de libre mercado (y de hecho, los resultados del análisis son estadísticamente significativos, con un valor P de 0,0220).
Ahora bien, hay quien puede argumentar que solo los países ricos pueden permitirse ser libres económicamente y por tanto es normal ver la emigración de los países más pobres a los países más ricos. Esto ignora el hecho de que los países ricos son ricos precisamente por sus políticas económicas.
He aquí los 22 países del “primer mundo” de Europa occidental, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Canadá, ordenados por mayor libertad económica:
- Luxemburgo
- Irlanda
- Nueva Zelanda
- Reino Unidos
- Dinamarca
- Islandia
- Australia
- Suiza
- Estados Unidos
- Suecia
- Finlandia
- Canadá
- Países Bajos
- Alemania
- Austria
- Bégica
- Italia
- Noruega
- España
- Portugal
- Francia
- Grecia
Estos países están entre los más basados en el libre mercado en el mundo, incluyendo a 7 de los 10 primeros. Incluso los tres menos económicamente libres de este selecto grupo (Portugal, Francia y Grecia, clasificados en el puesto 37, 44 y 59, respectivamente) están muy por encima de la media en su orientación al libre mercado.
Si nuestra tesis es correcta, incluso entre éstos deberíamos ver emigración de países menos libres económicamente a países más libres económicamente. Después de todo, si la analogía del espectro es cierta, la gente siempre irá hacia la mayor felicidad que se encuentra en economía de mercados más libres.
De estos 22 países del primer mundo, los 11 más libres económicamente tienen una tasa de emigración neta media de 2,68‰, mientras que los 11 menos libres económicamente tienen una tasa de emigración neta media de 2,01‰. En otras palabras, incluso entre estos países, los las libres económicamente muestra una emigración neta un 33% más positiva que sus pares menos libres. El principio se mantiene.
Incluso dentro de un país, podemos ver una emigración de las políticas de mercado más restrictivas a las más libres. En Estados Unidos, la emigración neta es un 23% mayor para los estados que tienen un gobernador de la derecha conservadora que para los estados con un gobernador liberal de izquierdas, y en general la plataforma política conservadora está más a favor del libre mercado.[3]
Incluso a nivel de condados, 97 de los 100 condados de más rápido crecimiento en Estados Unidos votaron a conservadores en las últimas elecciones, lo que equivale a más libre mercado.[4]
Al analizar la emigración neta de millones de personas tomando decisiones individuales todos los años en todos los países del mundo, somos capaces de validar objetivamente la tesis: en el espectro económico que va de las economía dirigidas centralizadamente hasta las políticas económicas descentralizadas del libre mercado, la gente tenderá a evitar la planificación centralizada y dirigirse hacia el libre mercado. En todos los casos, la gente está más feliz con mercados más libres y demuestra repetidamente esto con su elección de dónde vivir.
[1] Fuente: Índice de Libertad Económica 2005. [2] Fuente: CIA World Factbook. [3] Fuente: National Governor’s Association & U.S. Census Bureau 2000-2004 Migration Statistics. [4] Fuente: Los Angeles Times, 23 de noviembre de 2004.
Publicado el 4 de octubre de 2005. Traducido del inglés por Mariano Bas Uribe. El artículo original se encuentra aquí.