[Extraído de The Austrian (Noviembre – Diciembre 2016)]
INSTITUTO MISES: ¿Cómo conoció la economía austriaca y el Instituto Mises?
ROBERT LUDDY: Conocí la economía austriaca a través del Dr. Bill Peterson, un alumno de Ludwig von Mises. Nos conocimos cuando él era titular de la Cátedra Lundy de filosofía de la empresa en la Universidad de Campbell. El Dr. Peterson y yo nos hicimos amigos de por vida y tuve el honor de aprender bajo su tutela hasta su muerte en 2012. A lo largo de los años, acudimos a la Universidad Mises con mis dos hijos, así como a muchas conferencias del Mises.
IM: ¿En qué difiere su educación “austriaca”, con escritores como Peterson y Mises, de su educación formal en la universidad?
RL: Estudié economía keynesiana en la universidad y no valía para nada. Como dueño de una empresa, la economía austriaca tiene perfecto sentido para mí porque es la economía del libre mercado.
IM: ¿Ha habido algo concreto en la economía austriaca que usted piense que ha sido más útil que otras escuelas de pensamiento en economía?
RL: Los economistas austriacos son fiables y proporcionan soluciones reales que pueden ser entendidas fácilmente por la mayoría de la gente. Los austriacos tienen una comprensión perfecta de cómo funciona un mercado libre y de por qué la competencia del mercado libre produce empresas excelentes. Entienden que la competencia alimenta la excelencia y la ausencia de competencia produce las ineficiencias del gobierno y las grandes burocracias (por ejemplo, la educación pública).
IM: Ha dicho que entender ciertos conceptos económicos como el coste de oportunidad ha sido importante de su toma de decisiones como empresario. ¿Cómo le ha ayudado esto?
RL: Sí, usamos un amplio rango de conceptos, incluyendo la ventaja comparativa, el coste de oportunidad, no hay almuerzo gratis, los beneficios son una recompensa a la eficiencia, costes de transacción, ley de Say y destrucción creativa, por nombrar unos pocos. Siempre animo a los nuevos empresarios a aprender principios austriacos fundamentales si quieren tener éxito.
Ha mencionado el coste de oportunidad: esto nos ayuda a determinar cómo empleamos nuestro tiempo y nuestros recursos. El retorno sobre capital de inversión de CaptiveAire es el más alto en el sector de la climatización debido al diseño de nuestro producto, proceso de fabricación, utilización de materiales y eficiencia. Por ejemplo, en 1983 compramos una máquina de doblado hidráulico Darley para nuestra fábrica. La máquina era revolucionaria y reducía los cambios de troquel, maximizando la eficiencia. Estaba muy contento con ella, pero todavía requería dos cambios de troquel, lo que hacía perder tiempo. Después de comprarla, me dirigí al fabricante y pedí una máquina que no necesitara ningún cambio con herramientas. Un año después, la conseguí, años antes que el resto del sector, generando así grandes ahorros de eficiencia.
IM: Habiendo trabajado en su campo durante más de un ciclo económico, ¿cómo ha impactado el ciclo de auge-declive en su empresa y sus empleados y cómo le ha ayudado su conocimiento de la economía austriaca a entender el proceso?
RL: El ciclo de auge-declive es un problema para los fabricantes. En nuestros primeros años, la recesión de 1981 fue muy dura. Lo mismo pasó en 2008. En 40 años de empresa, 2008 fue el único año en el que reducimos personal: reducimos los gastos generales de operación y administrativos en un 20%. Para combatir las condiciones cambiantes, hemos construido nuestro sistema para que sea muy resistente, lo que es enormemente útil. Por ejemplo, un porcentaje del salario de todos los empleados incluye un bonus mensual que se basa en los beneficios y el rendimiento individual. Los bonus no están garantizados, así que si no obtenemos beneficios, no pagamos bonus. Otro ejemplo es que nuestras plantas de fabricación pueden reducir el tiempo de producción de cinco días a cuatro si es necesario. Esto traslada trabajo a momentos más valiosos. (Por ejemplo, todas las fábricas tienen una semana de vacaciones de Navidades durante un tiempo bajo de producción. Esto es obligatorio, lo que significa que tenemos disponibles las horas hombre para producción durante los momentos de demanda alta en otras partes del año).
Hemos podido hacer crecer las ventas en prácticamente todos los años flojos, salvo en 2008. Nos aseguramos de estar financieramente preparados para capear las peores recesiones no teniendo deuda, manteniendo reservas en efectivo y no extpandiendo en exceso el negocio ni siquiera de los buenos tiempos. También nos aseguramos de poner a prueba teorías y de mirar las cosas objetiva y lógicamente antes de ponerlas en práctica. Tienes que tener los pies en el suelo de la verdad y tener un buen proceso lógico y analítico para tomar buenas decisiones.
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